- La problemática generada por la falta de balance en la vida personal de los directivos tiende a aumentar drásticamente según sondeo realizado en Costa Rica por el Instituto de Estudios Empresariales (IEE) como parte del Estudio Latinoamericano “La Agenda del Directivo”.
27 de octubre, 2011. Hoy el IEE dio a conocer el sondeo realizado a directivos y directivas costarricenses para identificar las tendencias de tiempo destinado a trabajo y familia. La presentación la hizo la Dra. Paola Del Bosco quien coordina el estudio “La Agenda del Directivo” a nivel latinoamericano desde Argentina, el cual cubre un área geográfica que contiene al 85% de la población latinoamericana, y que representa el 89% del PIB de América Latina.
La Dra. Del Bosco destacó cifras interesantes de la Encuesta Regional “La Agenda del Directivo”, elaborado por el Centro de Conciliación Familia y Empresa (CONFYE) del IAE Business School de Argentina, junto con 10 instituciones de negocios de América Latina. Algunas como la cantidad de horas que dedican a la familia hombre y mujer cuando ambos trabajan fuera de casa, en el caso de las mujeres es de 34,7 horas por semana, mientras que en el caso de los hombres es de 17,7. En cuanto a la comparación de los países estudiados, llama la atención que Costa Rica aparece con el máximo de horas que dedican sus ejecutivos y ejecutivas al trabajo con 52 horas, seguido por Argentina, Brasil, Colombia y Ecuador con 49 horas, Chile, Guatemala y México con 48, y Venezuela con 47.
Según Roy Campos, Director Comercial del IEE, “diversos factores que paulatinamente han moldeado los mercados nacionales e internacionales, han generado una fuerte tendencia por parte de los directivos y ejecutivos de empresas a incrementar el espacio dedicado a sus actividades laborales. Este aspecto ha afectado especialmente al sector directivo y ejecutivo de las empresas, quienes laboran más de 52 horas semanales, según arroja la encuesta. Esto ha generado una serie de cambios en las costumbres y el estilo de vida de las personas, reduciendo de manera importante los tiempos de convivencia familiar, el esparcimiento y el crecimiento personal”. El sondeo fue realizado en Costa Rica por el IEE en el último semestre del 2010 a 122 directivas y directivos, con edades entre los 25 y 56 años, de empresas públicas y privadas con más de cien colaboradores, con el fin de brindar un diagnóstico inicial para identificar las tendencias que envuelven esta problemática y de esta manera reorientar los esfuerzos de los actores implicados.
Entre los resultados obtenidos, se evidenció cómo un 62% de la muestra expresa que las razones principales por las que este segmento extiende su jornada laboral más de lo conveniente es debido a la naturaleza de su trabajo, la cual en ocasiones tiene picos difíciles de prever, o bien porque la duración de estas jornadas se toma como un índice de autocrítica. Acostumbran extender sus horarios sobre los de las personas que se encuentran a su cargo, pues según su perspectiva es mal visto el salir antes que ellos, y su jornada laboral es comparada con la de sus jefes y sus iguales. Como resultado de esta situación, las personas consultadas señalaron que en ocasiones descuidan la planificación de sus actividades familiares, pues se encuentran de una u otra forma supeditados a sus actividades laborales.
Por otra parte, las actividades familiares no son las únicas que quedan relegadas por esta situación, sino también las actividades recreativas, de formación humana y cívica. A pesar de que aproximadamente un 66% de la muestra costarricense señala que la jornada laboral llega a extenderse más que en otros países, generando implicaciones negativas para su vida personal, más de la mitad de los consultados expresa que trabaja el tiempo necesario, e inclusive consideran que esta es una costumbre normal y hasta necesaria.
En general, este comportamiento responde a la existencia de una motivación, en algunos casos aspiracional, que funge como justificación para dicho sacrificio. Desde esta perspectiva se podría definir que existen razones de índole económico y de bienestar, pues la mayoría de personas consultadas concuerda en que el trabajo es el medio por el cual se obtienen los recursos económicos o materiales que les permitan alcanzar o mantener un estilo de vida y confort.
Por otra parte, existen los motivos de crecimiento personal y profesional, así como el entusiasmo de desarrollarse en el ámbito profesional. En cuanto a la definición de cuáles aspectos de su vida los llenan de satisfacción, existe una contradicción en cuanto a la definición de sus prioridades y la distribución de sus tiempos, puesto que gran parte de las personas consultadas menciona a su familia como principal fuente de satisfacción, seguido por el desarrollo de su carrera u ocupación. Esta condición discordante es reforzada en el momento en el que a los entrevistados se les consulta en qué consiste el éxito, ya que la mayor parte de ellos concluye que éste se da cuando las actividades laborales son acompañadas por una vida personal y familiar plena, junto con otros indicadores como el crecimiento y desarrollo personal, y el contar con una actividad que los estimule y les permita disfrutar de lo que hacen.
Para la mayoría de los encuestados, el éxito es alcanzado mediante el balance entre los logros profesionales y una vida personal y familiar sana; sin embargo, el número de personas que llegan a ser consumidos por jornadas laborales excesivas es alto, siendo este fenómeno cada día más normal e inclusive convirtiéndose en un factor inherente a este tipo de cargos. Entre las medidas de flexibilidad ofrecidas a los y las ejecutivas de América Latina, la preferida es la libertad en horario de entrada y salida (67%), seguida por una cantidad de días al año asignados para asuntos personales (39%), trabajo a distancia (por ejemplo, trabajar desde casa). Destaca que este tercer porcentaje aumenta en Costa Rica a un 52%.
Para más información: Gabriela Zamora al 8388-5217 de En-Comunicación, gabriela@en-comunicacion.com, o con Roy Campos 2283-0958, roy.campos@iee-cr.org.